jueves, 17 de noviembre de 2011

Verboice: Escucha y responde las voces de tu comunidad...


Verboice es la nueva herramienta tecnológica de InSTEDD que permite utilizar el poder de la voz para propiciar mejoras en materia de salud, seguridad y desarrollo. Se trata de un conjunto de recursos de código abierto y gratuitos que hemos ido desarrollando con el objetivo de simplificar significativamente el despliegue de aplicaciones de voz. Verboice les posibilita a organizaciones y comunidades crear sus propias plataformas de IVR (Interactive Voice Response –respuesta de voz interactiva–) a partir de las habilidades e infraestructuras de las que dispongan.

¿Por qué desarrollar una herramienta de estas características?

Durante estos últimos años hemos venido trabajando en unos cuantos proyectos vinculados con el intercambio de mensajes de texto, y nos ocupamos de desarrollar un servicio de SMS que sirviera de soporte para nuestras herramientas, y que verdaderamente nos facilitara la creación de otras nuevas: nos referimos a Nuntium. Sin embargo, en dicho período también nos dimos cuenta de la gran necesidad que teníamos de dar un paso más allá de los SMS...

Ya habíamos diseñado soluciones low-tech, de muy bajo costo, para resolver algunos de los problemas que se nos habían ido presentando, como en el caso de la Reporting Wheel, pero eventualmente decidimos comenzar a trabajar con la voz. Y al decir "voz" nos estamos refiriendo a configurar TICs capaces de hacer o recibir llamadas telefónicas de los usuarios, y permitirles interactuar escuchando las opciones de un menú, oprimiendo la teclas correspondientes en sus celulares y grabando mensajes de voz.

La voz es prácticamente independiente de la ubicuidad y de los caracteres (no importa si tu teléfono móvil no está preparado para soportar el alfabeto de tu idioma, siempre podrás hablar y escuchar en tu propia lengua a través de él), y por lo tanto constituye la clave para desplegar soluciones tecnológicas mucho más adaptables a los más variados contextos.

En InSTEDD trabajamos de una manera ágil e iterativa, creando prototipos con celeridad y saliendo a testearlos en el campo lo antes posible, junto con aquellos que serán sus beneficiarios. Ponemos el foco y nuestro énfasis en la simplicidad y la escalabilidad a lo largo de este proceso. Por ello procurábamos obtener una herramienta que les confiriera a las aplicaciones de voz la misma flexibilidad, escalabilidad y simplicidad que ya habíamos alcanzado respecto de los SMS.

¿Por qué no utilizamos simplemente aquellas aplicaciones que ya estaban disponibles?

Existe una gran cantidad de herramientas disponibles basadas en aplicaciones de voz. Algunas son gratuitas, algunas son open-source, otras están alojadas en la Nube, pero después de haber pasado un tiempo relevándolas y de haber revisto cuáles eran nuestras posibilidades, no pudimos encontrar en ninguna de ellas la solución integral que estábamos buscando...

He aquí una reseña de algunas de las heramientas que ya existen:

Tropo

Tropo es un excelente servicio web que les permite a los programadores desarrollar y ejecutar aplicaciones de voz. Esta herramienta constituiría una solución fantástica en el contexto de algunos de los escenarios de trabajo que se nos podrían llegar a presentar, a saber:
  • En caso de que debamos aplicarlo en alguno de los 40 países (la mayoría de ellos, países en desarrollo) para los cuales Tropo dispone de números telefónicos habilitados a tal efecto. 
  • Si tuviéramos conectividad vía internet entre la infraestructura de nuestros usuarios y Tropo.
  • Si no precisáramos recurrir a la infraestructura de algún operador telefónico local.
  • Si no necesitáramos que nuestros usuarios sean capaces de crear o modificar sus aplicaciones por sí mismos.
Por el contrario, en otras numerosas circunstancias Tropo no nos serviría, como por ejemplo:
  • Si no hay soporte en la región en la que debemos desplegar la aplicación. La mayoría de los países de América Latina, el sudeste asiático y África carecen de este tipo de soporte.
  • Si tenemos que conectar la infraestructura de nuestro cliente –bases de datos, sistemas preexistentes, etc.– con la aplicación de voz, pero se carece de conexión a internet. Tropo está alojado en la Nube, así que cualquier aplicación que uno pretenda que interactúe con él precisará indefectiblemente acceso a internet.
  • Si necesitamos trabajar en el marco de la infraestructura de una compañía telefónica y conectarnos a sus líneas telefónicas. Tropo provee sus propios números telefónicos, con su facturación respectiva. En la mayoría de los escenarios a gran escala que hemos visto, el proyecto involucra un acuerdo con un operador telefónico que provea la capacidad de efectuar llamadas desde el servidor de VoIP a los usuarios de la red telefónica, y viceversa. Con un poco de suerte, dicho acuerdo incluiría la reducción de costos para esas llamadas. En un contexto de estas características no nos serviría la tecnología de Tropo.
  • Si queremos que nuestros clientes puedan desarrollar sus propias aplicaciones de voz sencillas o mantener las que hemos diseñado para ellos. Tropo requiere que un programador de software diseñe dicha aplicación. Carece de una interfaz gráfica que le permita al usuario resolver la cuestión por sí mismo.
Adicionalmente, pensamos que podíamos desplegar una solución completamente open-source y gratuita. Si bien Tropo ha liberado parte de su plataforma bajo la modalidad de código abierto, la mayoría de sus componentes fundamentales están siendo desarrollados en un repositorio privado desde mediados de 2009, y el repositorio público no ha sido actualizado ni mantenido desde entonces. Nos pasamos dos semanas intentando instalar nuestro propio servidor de Tropo, y a pesar de que los miembros de su servicio técnico fueron sumamente atentos con nosotros, no logramos hacerlo funcionar. Necesitamos algo mucho más simple para nuestros proyectos...

Twilio

Twilio es otro servicio de aplicaciones de voz, muy parecido a Tropo. Todo lo que ya hemos dicho más arriba se aplica también a esta alternativa, con la agravante de que Twilio sólo provee números para EE.UU. y Canadá.

Asterisk y Freeswitch

Asterisk y Freeswitch son dos magníficos proyectos de código abierto que cuentan con grandes comunidades y un muy buen soporte técnico. Las características principales de ambos son similares, y proveen capacidades de PBX (Private Branch Exchange –mini-central privada para extensiones telefónicas–). El rol del PBX solía ser (y aún lo es en la mayoría de los casos) cubierto por una caja gris ubicada en algún punto de la oficina, con todas las líneas telefónicas entrantes de un lado y todas las líneas de las extensiones –o internos– del otro. El PBX provee funcionalidades tales como conectar llamadas entrantes con las extensiones, correos de voz, mensajes de aviso del tipo "Estoy fuera de la oficina", etc.

Prácticamente cualquier aplicación de voz puede ser desarrollada a partir de las plataformas Asterisk y Freeswitch. El problema reside en que ambas requieren conocimientos de programación altamente especializados, y están muy lejos de ser simples de desplegar, configurar, utilizar y mantener. De todos modos, ellas proveen un increíble nivel de soporte a dispositivos muy interesantes para interconectar tus líneas telefónicas (y ésa es la razón por la que son compatibles con Verboice –¡continúa leyendo!–).

Awaaz.De

Awaaz.De es un foro de mensajes de voz –de código abierto– relativamente nuevo. Permite que la gente llame a un número telefónico, deje mensajes de voz y escuche los que han sido enviados por otros. El equipo de Awaaz.De provee un servicio alojado en la India, razón por la que tú no necesitarás tener tus propias líneas telefónicas ni infraestructura si estás trabajando en dicho país.

Awaaz.De es el típico ejemplo del tipo de desarrollo que nosotros intentaríamos simplificar al máximo... El sistema ha sido diseñado sobre una plataforma de herramientas de IBM (Spoken Web y WebSphere Voice Server), y requiere no sólo acceso a software propietario comercial sino también un experimentado equipo profesional capaz de desarrollar la aplicación que correrá sobre dicha plataforma.

Freedom Fone

Freedom Fone provee una manera sencilla de construir menúes interactivos de voz y encuestas. Constituye otro gran ejemplo del tipo de aplicaciones articuladas con Verboice que uno podría desplegar muy fácilmente.

Freedom Fone fue construido sobre la base de Freeswitch, el PBX de código abierto mencionado más arriba. La creación de aplicaciones que interactúen con Freeswitch o Asterisk requiere la experiencia de un desarrollador de software habilidoso, con conocimientos acerca de cómo instalar y configurar el sistema, sumado al conocimiento acerca de cómo desarrollar otras aplicaciones por encima de aquéllas.

Freedom Fone es fantástico para desarrollos a pequeña escala, porque no necesitas una conexión a internet y puedes ejecutar la aplicación en tu propio servidor. Pero, por contrapartida, necesitarás tu propio servidor, además de algún dispositivo de hardware al que puedas colocarle las tarjetas SIM que serán utilizadas para realizar las llamadas telefónicas. No hay manera de conectarlo con líneas de Voice over IP, o a una infraestructura como la de las centrales que usan las grandes empresas.

¿Entonces, en qué consiste nuestro desarrollo..?

La solución tecnológica que hemos diseñado consta de varias capas. Cuando tú usas una de las capas más externas, no ves ni debes preocuparte por lo que hay debajo. Si esa capa no es lo suficientemente flexible como para satisfacer tus necesidades, simplemente la "pelas" y recurres a la que yace por debajo.

Comenzando por la capa más externa y yendo hacia adentro, tenemos seis capas:

1. Una interfaz gráfica online para crear aplicaciones de voz simples
Esta herramienta estará alojada online, y tú podrás crear aplicaciones de voz interactivas sencillas, configurando visualmente los pasos en tu cuenta. No son necesarios ni un programador de software ni un servidor en este nivel. Por ahora, sin embargo, lo que sí precisarás es un proveedor de línea telefónica del tipo VoIP (Voice over IP: Voz sobre Protocolo de Internet). Nosotros confeccionaremos una lista de proveedores recomendados en varios países, y con mucho gusto te ayudaremos a encontrar uno en el tuyo.


Si el VoIP no te funciona, siempre tendrás la alternativa de descargar Verboice en tu propio servidor y conectarle tu línea telefónica. En este caso aún podrás prescindir un desarrollador de software, en tanto continuarás creando tu aplicación visualmente, pero tal vez precises a alguien que pueda instalar y configurar el servidor.

Esta herramienta soportará las interacciones de voz más comunes, confiriéndoles una gran flexibilidad, sin dejar de ser fácil de usar. A continuación podrás ver algunos de los pasos que podrás incluir en tu aplicación:



2. Un servidor web para que puedas almacenar y ejecutar tus propios scripts
Si precisas más flexibilidad para crear tu aplicación que la que suministra la interfaz gráfica de usuario, soportamos dos estándares de voz basada en XML: Twilio Markups Language (TwiML) y VoiceXML.

Estos lenguajes XML le permiten a tu programador escribir fácilmente el script de una aplicación de voz completa. No necesitas tu propio servidor, aún puedes subir tu script a los nuestros y hacerlo correr desde allí, pero sí deberás proveernos tu línea telefónica de VoIP.

De todas formas, como en el caso anterior, siempre tendrás la alternativa de poder desacargarlo y desplegarlo en tu propio servidor, conectándole tus líneas telefónicas.

3. Un servicio web que te permite programar tus propias aplicaciones customizadas
Si el script no te resulta suficiente y dispones de un programador de software bien predispuesto, puedes aprovechar nuestro servicio web de programación para potenciar tu aplicación de voz. Lo bueno es que tu desarrollador puede trabajar en el lenguaje que él prefiera: .net, Java, Ruby, PHP, Python, etc. Cualquiera de ellos puede interactuar con nuestro servicio web. De esta manera podrás hacer que tu aplicación de voz pueda articularse con cualquier base de datos o sistema preexistente.

Éste es el nivel en el que podrías recurrir a Tropo y Twilio.

Una vez más, si dispones de tu propio servidor, podrás alojar allí tu aplicación sumada a Verboice, pudiendo prescindir de una conexión a internet.

4. Una librería que interactúe directa y sincronizadamente con Verboice
Si aún necesitas un control más refinado y no quieres depender de que tu aplicación se comunique con Verboice vía internet, puedes hacer que interactúe directamente con Verboice por código.

5. Un motor de aplicaciones de voz de código abierto y gratuito
Todo lo detallado arriba es open-source, al igual que los componentes centrales que permiten la funcionalidad de voz. En caso de que tú estés desarrollando alguna aplicación de complejidad extrema, o que presente requerimientos específicos que Verboice no pueda satisfacer, siempre tendrás la posibilidad de  modificar el código fuente y adaptarlo a tus necesidades: https://bitbucket.org/instedd/verboice/wiki/Home. ¡Tu aporte para mejorar el código será bienvenido!

6. La posibilidad de conectarse a cualquier tipo de infraestructura telefónica para recibir y realizar llamadas
Si aún continúas leyendo, en este punto la cosa se torna un poco más complicada... Si ninguna de las alternativas anteriores te han permitido solucionar el problema de que tus usuarios se comuniquen con tu aplicación, tal vez en este apartado encuentres la respuesta. Verboice ha sido creado como una aplicación "PBX-agnóstica", lo cual significa que puede ejecutarse en sea cual fuere la plataforma encargada de recibir y hacer llamadas telefónicas que estés utilizando. Hemos desarrollado soporte para líneas telefónicas SIP (el estándar VoIP), Asterisk y Freeswitch. Estas dos últimas cubren un amplio espectro de opciones de hardware.

Si estás trabajando con un hardware que no soporta Asterisk ni Freeswitch, y el VoIP no te sirve, siempre tendrás la posibilidad de crear tu propio adaptador para la infraestructura que precises usar, o bien puedes contactarnos, y nosotros lo desarrollaremos para ti.

Ejemplos

Hemos diseñado una herramienta llamada Watchfire, que utiliza Verboice. Fue desarrollada originariamente para la Cruz Roja, con financiamiento de Cisco, para ayudarlos a alistar voluntarios ante situaciones de emergencia, pero también puede ser utilizada para cualquier procedimiento de reclutamiento masivo geo-localizado, que requiera confirmación por parte de los destinatarios. Aprende más acerca de Watchfire: http://blog.ilabamericalatina.org/2011/09/la-herramienta-de-instedd-que-le.html.

Junto con PopCouncil hemos ganado una subvención para desarrollar una plataforma de monitoreo clínico de salud materno-infantil, para antes y después del parto. Baby Monitor será desplegado a partir de Verboice.

Próximos pasos

Estamos trabajando con mucho empeño en completar e ir mejorando todos los componentes mencionados arriba, mientras vamos aprendiendo a partir de la experiencia cosechada en la implementación de nuestras aplicaciones de voz en curso. Por favor, ponte en contacto con nosotros si tienes preguntas, ideas o sugerencias respecto del tipo de desarrollos que te gustaría que implementáramos o apoyáramos, o de qué manera Verboice te podría resultar útil: https://groups.google.com/group/instedd-tech/?pli=1.

sábado, 12 de noviembre de 2011

Ayúdanos a democratizar la información: ¡Vota por nuestra propuesta!


Por favor, ingresa aquí: http://www.changemakers.com/es/citizenmedia/entries/discover-and-share-true-story-one-bite-time y vota por nuestra propuesta de periodismo ciudadano que fue seleccionada como finalista en la competencia de Ashoka Changemakers. Simplemente haz click en el ícono "Votar". Luego, en "Confirma tu voto" aparecerá el típico botón azul de Facebook, y deberás loguearte, si es que todavía no lo has hecho. A continuación sencillamente acepta cuando el sistema te solicite permiso para acceder a tu información –es un procedimiento absolutamente seguro, y no implica el menor riesgo–. Listo.

Si no eres usuario de Facebook, el proceso también es sumamente fácil, y apenas te insumirá un par de minutos. En esa misma ventana emergente que se abrirá luego de que hayas clickeado "Votar", elige un nombre de usuario y una contraseña e ingresa tu dirección de e-mail. Copia las palabras de verificación que aparecen a la derecha y oprime "Crear un nuevo usuario". Inmediatamente después recibirás un e-mail que contendrá un link para que valides tu voto. Haz click en esa URL, y listo.


¡Gracias por ayudarnos a democratizar la información! Ashoka Changemakers es una organización que vincula a inversores, empresarios sociales y gente innovadora en general para el desarrollo de emprendimientos de alto impacto social. Para ello organiza competencias internacionales en las que se seleccionan propuestas que apunten a resolver problemáticas específicas. Como te decíamos, hemos presentado un proyecto de plataforma tecnológica para telefonía móvil que promueve el periodismo ciudadano, que ha resultado finalista de la convocatoria Medios Ciudadanos: Un Desafío sobre Innovación a Nivel Mundial, patrocinada por Google.

Ahora necesitamos que nos vote la mayor cantidad posible de personas que empaticen con nuestra causa, y que a su vez nos den una mano para difundir nuestra propuesta entre sus conocidos, reenviándoles el link que encabeza este post, para que se multipliquen nuestras chances de ganar, de manera que podamos contribuir al desarrollo de una plataforma periodística absolutamente participativa, transparente –no manipulable–, escalable y verdaderamente independiente.

Si deseas interiorizarte un poco más acerca de nuestro proyecto, puedes leer este post que hemos escrito en este mismo blog: http://blog.ilabamericalatina.org/2011/11/una-nueva-forma-de-periodismo.html. En nombre de todo el equipo del InSTEDD iLab América Latina, muchas gracias por tu cooperación.

jueves, 3 de noviembre de 2011

¿Una nueva forma de periodismo?


Seis sabios hindúes, ciegos de nacimiento, quisieron saber pragmáticamente qué era un elefante. Debido a su condición, decidieron hacerlo valiéndose del sentido del tacto. El primero en acercarse hasta el elefante chocó contra su ancho y duro lomo y dijo: "Ya veo, es como una pared". El segundo, palpándole el colmillo, exclamó: "Esto es agudo, redondo y liso; yo diría que el elefante es como una lanza". El tercero tocó la trompa retorcida y gritó: "¡Dios me libre! El elefante es como una serpiente". El cuarto extendió su mano hasta la rodilla del animal, tanteó en derredor y dijo: "Está claro, el elefante es como un árbol". El quinto, que casualmente se había topado con una de las orejas, afirmó: "Hasta el más ciego de los hombres se daría cuenta de que el elefante es como un abanico". El sexto, que le había palpado la inquieta cola, acotó: "El elefante es muy parecido a una soga". Y así, los sabios discutieron largo y tendido, cada uno de ellos manteniéndose excesivamente obstinado respecto de su propia opinión. Y aunque parcialmente en lo cierto, estaban todos equivocados...

Esta conocida parábola sufí, atribuida a Rumi, cobra inusitada vigencia en los tiempos que corren. La lógica paradójica claramente plasmada en ella demuestra que aunque una persona diga blanco y otra negro, ambas pueden equivocarse y tener razón al mismo tiempo... Nadie puede estar en posesión de una única verdad monolítica: cada uno aportará su propia visión sobre el mundo. Aunque superficialmente pueda parecer que estos puntos de vista se contradicen, en realidad forman parte de algo mucho más complejo. La verdad siempre será infinitamente más intrincada que el resultado de cualquiera de los acercamientos parciales del ser humano.

En este mismo espacio, en reiteradas oportunidades, hemos hecho hincapié en lo valiosa que nos resulta la experiencia de compartir información y conocimiento e intercambiar ideas de manera veloz y expeditiva gracias a las nuevas herramientas que proveen las redes sociales, la tecnología móvil y toda la parafernalia de dispositivos funcionales a dichas plataformas. Esto ha permitido el surgimiento de una nueva forma de periodismo, absolutamente participativa, que amplía poderosamente la capacidad de cobertura, refinación, edición y publicación de las noticias, donde cada individualidad aporta su propia visión del evento.

Estos pequeños módulos de información, correctamente articulados, pueden proporcionarnos un acercamiento bastante aproximado de lo que sería la "big picture", y nos permiten superar las brechas responsables de que la información resulte fraccionada, parcial y contradictoria, como la que fueron barajando los seis ciegos individualmente, antes de ponerse a consensuar y dirimir cómo se debería conjugar cada uno de esos seis pedacitos de información para conducir hacia una verdad lo más objetiva posible.

Este post está inspirado en A New Kind of News?, escrito por Nicolás de Tada en su blog.

El periodismo de ayer

Durante la mayor parte del tiempo de lo que podría considerarse la era del periodismo tradicional, los reporteros recolectaban información y hechos, otra persona –o la misma– escribía el artículo, un editor podía corregir y rearmar algunas cosas, y tal vez solicitase que se investigara y se profundizaran algunos detalles, y finalmente las noticias se publicaban, para que el público masivo las pudiera consumir.


El periodismo de hoy

En los últimos años nuevas herramientas tecnológicas han permitido instaurar lo que podríamos denominar el "periodismo ciudadano". Todo aquel con la voluntad suficiente y el acceso a ciertos dispositivos tecnológicos mínimos y a una buena conexión a internet actualmente puede reportar lo que está presenciando, y compartirlo con los demás. Dependiendo de qué tan buenas sean sus habilidades y el material del que dispone, su audiencia podría llegar a ser tan grande, o incluso mayor, que aquella a la que tienen llegada las vías de comunicación promedio. La popularidad ya no continúa limitada al acceso a los medios convencionales, a través de la prensa escrita, un canal de TV o una emisora radial.

Algunas organizaciones tradicionales del mundo de los medios han propiciado y perfeccionado esta nueva tendencia aprovechando el material producido por ciudadanos comunes, y permitiendo que ellos se transformen en sus ojos y oídos adicionales en la escena misma de los diferentes eventos periodísticos. De todas formas, el proceso de curación, verificación y edición de la información aún continúa recayendo sobre dichas entidades.


Al mismo tiempo, numerosas herramientas tecnológicas han permitido que grupos de ciudadanos colaboren y contribuyan  a generar un vasto repositorio de información, como ser opiniones, reportes de violencia o conflictos que ellos hayan presenciado, datos cuantitativos, etc., pero aun así, el proceso de curación, verificación/validación, edición y publicación es llevado a cabo por un tercero, ya sea un individuo o bien un grupo de personas.

En sendos escenarios sólo la recolección de la información ha sido descentralizada y distribuida. El verdadero acto consistente en favorecer que se entienda el sentido mismo de la noticia y que pueda comprenderse cabalmente qué está pasando continúa siendo un proceso que se lleva a cabo en un entorno controlado y centralizado.

¿El periodismo de mañana..?

Piensa en el proceso típico de un evento periodístico cualquiera en curso. Hay un equipo de reporteros, algunos corresponsales, tal vez unos pocos informantes freelance y colaboradores. Luego entran en escena el periodista, que recoge todas las piezas y arma la historia, y el editor, que solicita aclaraciones o precisiones complementarias. Y por último se lleva a cabo el proceso de difusión de la noticia. Ahora imagínate cómo sería si todo el mundo en el equipo pudiera alternar su papel con la frecuencia que deseara: el periodista podría ser el informante; el colaborador freelance, el editor; y el editor, un lector.

Y aventurémonos aún un poco más: imagínatelos a todos ellos haciendo todo eso al mismo tiempo... Ahora bien, supongamos que no trabajan en el mismo edificio, y tal vez ni siquiera se conozcan entre sí. Y ahora permitámonos pensar que viven en lugares diferentes, algunos están en el campo, otros en una oficina, algunos tienen acceso a las noticias conocidas, otras están desconectados de ella, pero participan del evento en tiempo real...


¿Cómo sería transformar el completo acto del periodismo de manera tal que esté distribuido entre absolutamente todos aquellos que deseen participar de él? Pero, y más importante aún, ¿habría alguna manera de articular todas esas pequeñas historias a efectos de que terminen conformando una crónica que tenga sentido?

Alrededor de 1910 el movimiento cubista postuló que algo andaba mal en la manera en la que todos los artistas plásticos venían pintando hasta ese  momento. Las cosas eran representadas desde una única perspectiva. La verdad que estaba siendo transferida al lienzo sólo estaba capturando una parte de la realidad: resultaba fraccionada por el diseño, incompleta por definición y ontológicamente falsa como conclusión.


Como puedes apreciar en esta obra de Juan Gris, Mann im Café, de 1914, los pintores cubistas intentaron presentar los objetos mediante la condensación de todas las perspectivas al mismo tiempo... Según cuentan las crónicas de la época, por ejemplo, el artista colocaba una naturaleza muerta sobre una plataforma giratoria –motorizada– para esculturas; cada vez que sus vista se desplazaba del objeto hacia el lienzo, y viceversa, para capturar una faceta, una nueva perspectiva se presentaba ante sus ojos...

Creemos que algo parecido podría darse con el nuevo periodismo. Estamos convencidos de que no sólo el trabajo de reportero podría estar totalmente disribuido, sino que también todo el acto de creación, curación, validación, verificación y edición podría estar descentralizado y dispuesto completamente libre de limitaciones y roles fijos. Somos de la opinión de que desestructurando el proceso, una obra mucho más rica y completa podría formarse, y de esta manera podría aparecer la verdadera historia.


¿Cómo luciría algo de semejantes características? ¿Cómo podría evitarse la cacofonía que produciría el hecho de que todo el mundo hable de cualquier cosa al mismo tiempo? Pues bien, primero deberíamos separar la información reportada en pequeños fragmentos. Resultaría mucho más difícil para cualquiera decir que está de acuerdo o que disiente con un artículo de 3000 palabras. Ciertamente habrá algunos aspectos con los que coincidirás, otros de los que no estarás tan seguro y otros a los que categóricamente te opondrás. Si el hecho que promueve tu confrontación está contenido en una oración corta, probablemente te resultará mucho más fácil definir tu postura al respecto. Además, de esta forma no correrás el riesgo de desechar hierba buena junto con las malezas...

En este contexto, el nuevo formato de módulos de información en 140 caracteres se torna sumamente útil. Si toda la historia está compuesta por pequeños tramos de 140 caracteres de longitud, el proceso de refutación, discusión, confrontación, negación y confirmación de partes del evento se vuelve mucho más manejable. Y distribuible...

Ahora digamos que hay múltiples formas en que esas piezas pueden estar relacionadas entre sí. La causalidad puede ser una relación, la correlación podría ser otra. Otras conexiones entre esas piezas podrían expandirse en cualesquiera de los ejes de la información contenida, como quién, por qué, cuándo, dónde, etc.

Abundan una gran cantidad de canales que permiten proporcionar información: cualquier persona con acceso a internet a través de una computadora o un dispositivo móvil o un teléfono habilitado para intercambiar mensajes de texto podría contribuir con sus bits de información respectivos.


Agreguemos ahora un sistema en el sector de la recepción de este proceso que, básicamente, funcione como el conducto agregador de información de estas porciones de datos. Por ejemplo, si alguien reporta algo en Lima, Perú, la plataforma lo enviará a otros usuarios en la misma región y les pedirá que lo confirmen, lo nieguen o bien lo amplíen. El sistema podría ayudar a cualquiera en el campo a informar a través de mensajes de texto para crear los nodos de piezas de información mediante la ampliación de los ejes deseados. Un diálogo entre el ciudadano y la herramienta podría ser el siguiente:

Ciudadano: "Se están registrando tiroteos en Lima".
Sistema: "¿Sabes cuándo empezó?".
Ciudadano: "12:35 a.m.".
Sistema: "¿Sabes cuál fue la causa?".
Ciudadano: "En un allanamiento, la Policía está tratando de irrumpir en un depósito de droga".

O el ciudadano podría presentar de forma proactiva diferentes fragmentos conectados sin el diálogo con el sistema. O simplemente podría enviar fragmentos inconexos de información, y otros podrían ayudar a relacionarlos. Hay una serie de alternativas de diseño que deben ser analizadas.

Cualquier persona interesada en una región específica o en cierto tema en particular podría ser suscripto y ser notificado cuando se reporten nuevas entradas. Podría participar en la creación de historias mediante la adición de otros módulos de información, refutar algunos de los informados o crear nuevas relaciones entre los diferentes nodos que componen la historia.

Al igual que en el caso de la plataforma giratoria de los cubistas, el sistema actuaría como una "plataforma giratoria de perspectivas", asegurándose de que todo el mundo tenga voz en el proceso de reconstrucción y armado de la historia, y de que todos los ángulos, las opiniones en conflicto, hechos, fechas y lugares estén siendo combinados e interconectados en una red que pueda ser fácilmente navegada por las personas que tratan de entender la crónica.

Esto de ninguna manera reemplazaría a una bien escrita –y cuidadosamente investigada– narrativa coherente. Por el contrario, ello reforzaría ese proceso, apuntalándolo y liberando el potencial para que cualquiera tenga acceso a una red mucho más rica y completa de piezas de información sobre la que construir su propia versión de la realidad.

Partimos de la premisa de que cualquier historia está hecha de pequeñas piezas que están relacionadas con diferentes conectores semánticos, y de que para la gente resulta mucho más fácil tener una opinión determinada y específica sobre pequeños segmentos de información. El diseño de un sistema que permita crear el gráfico resultante del ensamble de las piezas de información provenientes de la red de distribución es el desafío que tenemos por delante...

Tenemos algunas ideas sobre cómo esto se podría hacer, y queremos involucrar a otros para que trabajen junto con nosotros en la exploración de esa posibilidad. A tal efecto hemos presentado una propuesta, Discover and share the true story one bite at a time, en el marco de una de las competencias que organiza Ashoka Changemakers. Conócela, involúcrate, postea comentarios sobre ella, contribuye con tus ideas, ponte en contacto con nosotros y ayúdanos a crear una plataforma que promueva un enfoque mucho más transparente, descentralizado y holístico del periodismo.